Pocas cosas me hacen abandonar mi vagancia de los últimos tiempos para venir aquí y publicar alguna que otra cosilla. Pero creo que Sean Connery se merece un esfuerzo.
Connery era un señor que gustaba mucho a las mujeres, yo me incluyo, aunque personalmente lo encontraba más atractivo en su época madura, películas como Los últimos días del Eden demuestran sobradamente por qué fue escogido como hombre más sexy del siglo XX.
Fue un actor al que la mayoría identifica con el agente con licencia para matar, aunque tuvo otros muchos papeles más memorables, su personaje de Guillermo de Baskerville, un monje con dotes de detective, así como el Jim Malone de Los intocables de Elliot Ness son de mis preferidos, también encontré interesante su papel en Odio en las entrañas donde comparte protagonismo con Richard Harris.
En fin, yo solo quiero dejar constancia de mi admiración por este escocés que saliendo prácticamente de la nada se hizo a sí mismo. Ya otros blogs más especializados seguro que hablarán más y mejor. Eso sí, lo único que no le perdono es aquel bodrio que hizo de Zardoz. ¡Dios mío, aún me duelen los ojos!
Descanse en paz Sir Sean Connery.