Nos conocimos en los primeros carnavales que se celebraron en Las Palmas tras la muerte de Franco, debo decir que nuestra primera mutua impresión fue poco favorable para ambos, me reservo lo que pensamos en ese momento, eso queda para el secreto de sumario.
Han pasado ya unos cuantos años de eso, 44 para ser exactos, y desde hace 42 años, pronto harán 43, compartimos nuestras vidas. Julio ha sido desde entonces mi mayor apoyo, hemos tenido, como cualquier pareja, altibajos que hemos superado en mayor o menor grado pero ahí seguimos y espero que aún nos queden unos cuantos años más para disfrutar juntos. Le agradezco profundamente todo el amor que puso en el cuidado de mis padres, amor que fue correspondido por mis viejitos y que hizo que algunas veces me pareciera que lo querían más a él que a mí.
Julio ha sido buen hijo, buen esposo, buen yerno, buen padre y ahora es un abuelo al que se le cae la baba por los nietos. Hoy cumple 73 años y he querido hacerle este pequeño homenaje por aquí, ya que de momento prefiero no salir a celebrarlo fuera, ¡ya vendrán tiempos mejores! o al menos eso espero, y sea lo que sea lo que nos depara el destino espero que al menos podamos seguir riendo juntos y peleándonos por el control del mando de tv por un buen espacio de tiempo.