La señora Lorenza

En Cuba no se acostumbraba a celebrar el santo sino el cumpleaños, pero a pesar de eso, cuando yo era niña había una señora que siempre me enviaba un regalo por mi día. Mi padre me lo llevaba a casa y me decía: "Esto te lo manda Lorenza", y entonces al lunes siguiente mi madre me llevaba a dónde estaba la señora para que yo le diera las gracias. Recuerdo que siempre era un regalo de Myrurgia, de Maja, y me gustaba guardar las envolturas de los jabones entre la ropa. Han pasado muchos años de todo esto, medio siglo, y sin embargo siempre me acuerdo de esa señora que tenía una atención hacia mi aunque su situación no le permitía muchos dispendios, ella limpiaba las escaleras de varios edificios y la recuerdo como una señora bastante mayor y muy cariñosa conmigo. Vaya con estas líneas este pequeño homenaje a Lorenza, donde quiera que esté.

Ayer fue viernes de Dolores y aunque sigo sin celebrarlo, mi amiga Moma me trajo una sorpresa abalórica que me ha puesto los dientes largos, espero que pronto pueda mostrarles alguna cosita hecha con estos materiales tan delicados. Y hablando de Moma, les invito a ver su galería en flickr dónde nos muestra las camisetas tan lindas que pinta. Moma, ¡eres toda una artista!